Una fecha: 6 de Junio de 1944. Un territorio: Normandía, noroeste de Francia. Dos bandos: la Alemania Nazi de Hitler y los aliados, con EE.UU al frente y otros (Canadá, Reino Unido, etc.) como lugartenientes. Una decisión: liberar la Europa occidental del dominio alemán. Una cifra: 170.000 soldados cruzaron el canal de la Mancha de Inglaterra a Francia.
Todos esos datos unidos forman el llamado día D o desembarco de Normandía. Un día que cambió la historia moderna y supuso el primer paso hacia la descomposición del imperio alemán que tenía dominada, aterrorizada y sometida a más de media Europa, por no hablar de las millones de víctimas que dejaron a su paso. Afortunadamente, tras varias semanas de intenso combate, la liberación inicial de Francia se extendió por todos los territorios hasta suponer la completa derrota y feliz disolución de la Alemania Nazi. No olvidemos que hablamos de 1944, no de hace varios siglos.
En este viaje por Normandía recorremos varios de esos lugares que cambiaron la historia. Aún ahora sigue siendo complejo imaginar cómo fueron en realidad esos momentos, tan sólo atisbamos a contemplar algunos recuerdos, monumentos, cementerios o escenas de la época, pero el acontecimiento fue de tal magnitud que harían falta cientos de horas de metraje o miles de líneas de escritura para entenderlo. Esta es nuestra humilde aportación en forma de artículo y vídeo recorriendo estos lugares históricos de la Segunda Guerra Mundial.
Recomiendo ver la película “El día más largo” para poner en contexto todos los escenarios y entender mejor la historia.
Comenzamos en Pointe du Hoc casi al atardecer del día 7 de Diciembre tras un largo recorrido que nos traía desde Nantes y previa parada en Rennes. Son las 17:00 y con puntualidad británica el centro de visitantes cierra sus puertas, pero se permite el acceso al complejo donde se sitúa los recuerdos de una de las batallas más duras de todo el desembarco de Normandía. No hay nadie más visitando el lugar lo que genera aún más emoción.
Table of Contents
Pointe du Hoc.
Se trata de una zona situada en la cima de un acantilado, a 6,4 kilómetros al oeste de Omaha Beach. Por su complicada orografía los aliados lo consideraron un punto clave del desembarco, ya que se pensaba que habría grandes baterías alemanas esperándolos, sin embargo éstas se situaban en el interior de la zona. Pese a todo, los valientes soldados americanos escalaron con cuerdas los 30 metros de altura e inutilizaron la fuerza alemana y las baterías del interior. Sin embargo, esto tuvo un precio: tan sólo unos 90 soldados sobrevivieron de los 225 que desembarcaron.
Actualmente, en la zona se pueden observar algunos bunkers y pasear por la zona en un camino habilitado, pero lo que impresiona son los enormes cráteres dejados por los bombardeos aliados previos al día D.
Esa noche nos trasladamos a Caen, donde establecemos el campo base para los próximos dos días.
El Memorial de Caen.
Despertamos pronto para visitar el museo más importante de toda la zona: el Memorial de Caen, centro para la historia y la paz. La visita es un recorrido fundamental por los componentes históricos y geopolíticos de la Segunda Guerra Mundial. Pasamos 4 horas visitando el museo, deteniéndonos en los hechos principales, observando los recuerdos y dejando la zona dedicada al desembarco y el documental histórico para el final. La película proyectada es un perfecto resumen, duro e intenso, de lo que se vivió el día D.
Destaco un par de cosas del museo: se puede visitar la recreación de un búnker alemán, pero se queda algo incompleta e impersonal y no tiene una amplia colección de vehículos militares como podría esperarse, tan sólo algún tanque, avión o 4×4.
Si vais en día laborable os encontraréis muchas visitas escolares haciendo trabajos en el museo, buscad vuestro espacio entre el ruido y el gentío para asimilar lo mostrado en el museo.
Las baterías alemanas de Longues-Sur-Mer.
Tras la visita recuperamos el coche y en apenas 40 minutos nos encontramos, de nuevo en solitario, en otro escenario de la Segunda Guerra Mundial: las baterías alemanas de Longues-Sur-Mer, la única playa de Normandía que aún conserva sus cañones originales. Es aquí donde se situaban los temidos cañones navales de 155 mm. Y aún ahora, impresiona observarlos tan de cerca.
La batería estaba protegida por varias fortificaciones tipo “tobruk”, que podían estar armadas con ametralladoras, morteros o incluso torretas de tanques. El perímetro de la batería estaba protegido por alambradas, y disponía de trincheras de comunicación entre las baterías y el puesto de control de tiro.
Fue un tremendo éxito para los aliados conseguir el control de estas baterías, ya que estuvieron bombardeando la zona, sin demasiado éxito, durante las horas previas al desembarco. Finalmente, tanto la armada inglesa como francesa, consiguieron acertar desde sus barcos con la zona y los soldados pudieron sitiar todo el lugar.
Una de las escenas clave de la película “El día más largo” transcurre aquí, momento en el cual los alemanes se dieron cuenta de la magnitud del desembarco que se iba a producir.
Fuente para los datos históricos.
Cementerio estadounidense de Colleville-sur-Mer.
Llegaba el momento de poner rumbo al único cementerio que visitamos en la zona: el cementerio estadounidense de Colleville-sur-Mer, situado en una colina encima de Omaha Beah. Un lugar solemne, gestionado íntegramente por los EE.UU con el suelo donado por Francia y donde están enterrados más de 9300 soldados.
La famosa película “Salvar al Soldado Ryan”, sobre el desembarco de Normandía, comienza con una escena en este cementerio.
A la entrada del recinto podemos ver un pequeño museo y, en mi opinión, la mejor representación mural del desembarco de Normandía.
A pocos pasos se sitúa el cementerio, presidido por un estanque central y varias banderas estadounidenses. Los nombres de los 1557 estadounidenses que perdieron la vida en el conflicto pero no han podido ser ubicados o identificados están inscritos en las paredes de un jardín semicircular al lado este del monumento.
La música es ceremonial y pasear por sus jardines es triste, muy triste. Miles de cruces blancas y algunas estrellas de David nos recuerdan a los caídos no sólo en la playa de Omaha, sino en toda la zona.
En la zona hay otros cementerios: alemanes, canadienses y estadounidenses, pero por limitaciones de tiempo sólo pudimos visitar éste.
La playa de Omaha (Omaha Beach).
Y concluimos nuestro viaje en el punto estrella del desembarco de Normandía. Lo que ahora es una bella playa de arena fina y tranquilas aguas, fue el escenario de una de las batallas más sangrientas y duras de cuántas hubo.
Se consideraba Omaha la clave para conectar todas las playas y tener aseguradas todas las posiciones de costa, pero lo que sobre el papel era complicado, se convirtió en un casi imposible, por la resistencia que ofrecieron los alemanes aquí. Poco a poco y con algunos tanques ya sobre el terreno se fueron ganando posiciones. Ya en posteriores oleadas de desembarco se controlaron los primeros puestos alemanes, aunque se tuvo que esperar hasta el día 7 de Junio para tener casi el control absoluto de la zona. Omaha había sido conquistada y se produjo el gran desembarco de suministros y refuerzos. Los aliados comenzaban su verdadero despliegue.
Hasta aquí nuestro viaje por Normandía, con la emoción de haber visitado escenarios históricos y haber comprendido un poco más los acontecimientos que cambiaron la historia del siglo XX. Además, tuvimos la gran suerte de haberlo hecho en Diciembre y sin una gota de lluvia, hecho que agradecimos, aunque casualmente deslució nuestra visita a lugares que esperábamos grises y nubosos y que encontramos azules y despejados.
Al día siguiente y para poner el broche a Normandía pusimos rumbo al Mont Saint-Michel para vivir un idilio con ese mágico lugar, pero eso es otra historia.
Datos de interés sobre los lugares visitados en Normandía.
- Los accesos a Pointe du Hoc, Omaha Beach, el cementerio estadounidense y las baterías alemanas son gratuitos.
- En todos ellos hay centros de visitantes o museos que nos permiten complementar la visita.
- El museo Memorial de Caen es bastante caro (15-20€), pero es imprescindible para entender Normandía y el desembarco.
- Las carreteras están en perfecto estado y todo muy bien señalizado, aunque un GPS siempre se agradece.
- Es muy buena idea establecer Caen o Saint-Lo como campos base para visitar la zona.
- Evidentemente hay muchos más lugares de interés, pero en un día y medio es lo máximo que pudimos visitar.
- Para más información histórica y de lugares, puedes consultar los completos artículos de Antonio Quinzán sobre Normandía y sus escenarios.